El modelo de negocio de Bridgestone busca garantizar que la operación de la empresa genere valor a todos sus grupos de interés. Para lograrlo, parte de sus tres áreas prioritarias teniendo en cuenta el ciclo de vida del producto como marco de la sostenibilidad.

De esta manera, la generación de valor de la empresa cumple con la normatividad aplicable, impulsa la rentabilidad y la evidencia, al tiempo que reduce la huella ambiental y sirve a la sociedad con calidad superior.